Sobre el Autor:  Ingeniero en pesca de toda clase, multipescador. Es de los que creen que todos los peces son lindos para pescar y si es con artificiales mejor. Villa Tokio y Palermo lo vieron crecer. Su lema la fe no solo mueve montañas sino tambien hace pescar señuelos.
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Hace unas semanas nos llegó la gran noticia de que un grupo de acuicultores logró reproducir en cautiverio a nuestras amadas Hoplias malabaricus. Algo que se había intentado antes varias veces sin éxito. Este logro abre puertas a la posibilidad de repoblación de ambientes, algo también muy difícil pero que sin este paso previo era imposible siquiera de pensar. A continuación el reportaje con el equipo “Hopliass”, los autores del proyecto, para que todos puedan conocerlo y aprender un poco más de la biología de las tarariras.

¿Podrían contarnos cómo comenzó este proyecto?
Esta idea nace hace aproximadamente tres años, cuando uno de nosotros por accidente encontró un varamiento de tarariras en un canal en el sur de la provincia de Buenos Aires. Estos ejemplares fueron llevados para evitar que murieran y se adecuó un pequeño estanque para mantenerlos. En ese momento surge la idea de buscar reproducirlos.
Después de un tiempo y por cosas de la vida, nos conocimos, Oscar que es técnico de producción, Alejo y Mariluz, acuicultores. Fue casi por azar, pero bastó una charla corta para saber que estábamos en el mismo camino.
A partir de ese momento y teniendo en cuenta que la reproducción en cautiverio no había sido posible, decidimos tomar este reto enfocados en generar alevinos de tararira en forma controlada, para posteriormente repoblar cuerpos de agua naturales y artificiales.
Pusimos en marcha un arduo trabajo que hasta hoy estamos afinando.

¿Qué nos pueden contar del proceso productivo de ovas? ¿Cómo arranca?
En cuanto a la experiencia en nuestro proceso productivo, te podemos comentar que un reproductor está en condiciones de generar dos mil ovas o más, pero de éstas sólo entre el 5% y el 10% llega a feliz término. Éste es el principal logro obtenido, pues de un desove similar pero en un medio natural tan sólo veinte o veinticinco animales logran alcanzar los 12 cm, que viene a ser el cuello de botella de la especie, principalmente por la baja probabilidad de supervivencia en el medio.

Los estadios iniciales constituyen la etapa más difícil de sobrepasar con una larva de depredador. Cuéntennos un poco cómo son esos primeros pasos en la vida de una tararira y cómo lograron sortear la problemática de la alimentación con éxito.

En los primeros estadios de vida, la larva tiene un color rojo bordó muy llamativo, gran voracidad y alto consumo de alimento vivo. Para esto último nos ocupamos de mantener cultivo vivo con alto porcentaje de proteína, logrando suplir las exigencias nutricionales en esta etapa, que es una fase compleja del cultivo.
Los alevinos son mantenidos con aireación en una densidad de un animal por cada dos litros de agua, y las fluctuaciones de temperatura son controladas en especial en los primeros estadios, siendo ideal mantener las crías en un rango de 21°C a 27°C.
A partir de una talla aproximada de 3 cm., la alimentación de las crías es netamente a base de peces vivos, permitiendo una excelente nutrición y sobre todo que el animal mantenga su capacidad de capturar presas vivas. Esto teniendo en cuenta que a futuro este juvenil debe enfrentarse al medio natural con las características propias de la especie.
Los alimentos que venimos utilizando son principalmente mojarritas y panzones; dado que cada alevino consume en promedio cinco presas por día, es necesario acompañar el cultivo de hoplias con una producción permanente de alimento natural. Esto permite un crecimiento promedio de 12 a 15 cm. por año, lo que encarece la producción en cautividad.

¿Cómo mantienen a los reproductores y a los alevinos? ¿Qué infraestructura utilizan?
Nuestras instalaciones están provistas de un área para mantenimiento de reproductores, otra destinada al proceso de alevinaje en el laboratorio y otra orientada al engorde hasta alcanzar la talla de siembra. Cada una de estas áreas recibe un manejo diario de control de parámetros, calidad de agua y alimento vivo. Teniendo en cuenta las dificultades climáticas, hemos dispuesto un sistema de invernaderos que permiten manejar mejor las variaciones de temperatura.

¿Las tarariras tienen problemas de enfermedades al estar en este tipo de ambientes?
Si bien la tararira en el medio natural sufre los peligros propios de cualquier especie, en condiciones controladas también hemos registrados dificultades para su cultivo, como la presencia de parásitos, protozoarios en tegumento y branquias y anorexia. Estos deben ser controlados a partir de una buena calidad de agua y alimento vivo con controles sanitarios.

¿Han logrado establecer cuántos años son necesarios para la maduración sexual de los peces?
A partir de una primera experiencia con animales de medio natural traídos a nuestras instalaciones, y basados en la intención de mantenerlos y luego reproducirlos, pudimos comprobar que los animales salvajes reabsorben sus productos sexuales al ser sometidos a condiciones de cautiverio. Por otro lado tenemos un plantel de animales nacidos en nuestras instalaciones de una talla promedio de 20 cm., a los cuales se les viene realizando un registro que va a permitir determinar el inicio de la madurez sexual.
Para determinar fehacientemente la talla mínima de madurez, venimos desarrollando un trabajo práctico que nos va a tomar un tiempo más poder difundir.

Con el objetivo de la reproducción en cautiverio y el logro de la supervivencia de los alevinos, ¿cuáles son los próximos objetivos del equipo “Hopliass”?
Dentro de nuestras metas en forma inmediata, una de las prioridades para la nueva puesta es incrementar el número de crías por desove. Para esto venimos afinando algunos cambios en el proceso de incubación.
De la mano con la producción de alevinos de hoplias, estamos además desarrollando la reproducción de mojarras, astianax fasciatum, la cual hemos logrado en nuestras instalaciones y para la que paralelamente elaboramos un protocolo de manejo pues, basados en la experiencia, la mojarra es la principal fuente de alimento para las hoplias y sus poblaciones se ven diezmadas en algunas épocas del año, lo que lleva a la necesidad de desarrollar su cultivo.
A mediano plazo, y conociendo como aficionados a la pesca deportiva la importancia de las tarariras, nos proponemos recuperar con un buen número de ejemplares algunos lugares potenciales para el desarrollo de esta práctica.

Como bien dijeron al principio, todo este proyecto implica grandes costos, ¿hay alguna entidad que los auspicie, o todo esto es fruto de un esfuerzo personal del equipo? 
Hopliass surge como una iniciativa personal y ha llegado a convertirse en realidad, con objetivos claros y bases sólidas, de responsabilidad y ética hacia las especies de importancia hidrobiológica, a partir de un gran esfuerzo personal y económico, en busca de resultados, paralelamente a nuestras actividades laborales, que son el soporte de recursos.
Este proyecto es, además, una forma de apartarnos del día a día, con la satisfacción de lograr un gran reto. No contamos a la fecha con el auspicio de ninguna entidad privada o estatal pero, dada la magnitud de las metas que nos hemos planteado, cualquier tipo de inyección de recursos facilitaría el trabajo que venimos desarrollando.


Durante estos años de trabajo en pos del objetivo, ¿hubo alguna conducta de estos peces que los haya sorprendido?
Cada día esta especie nos sorprende un poco más. Tal vez por lo cerca que estamos en cada etapa, hemos podido enamorarnos más de ella y son varios los aspectos que podríamos resaltar:
- Gran cuidado parental del macho protegiendo el desove, es un animal sorprendente que realiza guardias permanentes para cuidar su progenie, siendo la hembra quien protege de lejos el nido.
- La larva es sumamente llamativa, inclusive para ella misma, por lo que hay una alta posibilidad de predación en los primeros días de vida, siendo un primer obstáculo para que en el medio natural se produzcan poblaciones en alto número, como puede ocurrir con otras especies.
- La tararira es una especie mucho más amigable de lo que se cree,  permanece en cardúmenes de un gran número de ejemplares sin agredirse unos a otros; los organismos obtenidos en cautiverio tienen una excelente relación social con sus coespecificos.

Uno de los objetivos que previamente me comentaron es el repoblamiento de ambientes. Creo que la pregunta de muchos amigos pescadores sin dudas será ésta: ¿qué posibilidades de éxito creen que habría para repoblar las lagunas bonaerenses? ¿El daño en el ecosistema será el problema principal a sortear para lograr poblaciones sostenibles de hoplias? ¿Ya tienen alguna idea de cómo lo plantearían?
En primera instancia y con el fin de seguir sosteniendo nuestro proyecto, los ambientes a repoblar de forma inmediata son principalmente lagunas y cuerpos de agua privados o que estén en lugares con control de particulares que garanticen la pesca con devolución, con el fin de lograr que los peces que en nuestras instalaciones han superado la fase más crítica puedan, al ser incorporados a estos ecosistemas, adquirir la talla de madurez.
En una segunda etapa continuar con el repoblamiento de lagunas bonaerenses, que  pueda ir de la mano con una reglamentación especifica para la especie, para poder así garantizar que estos ambientes sean sostenibles, dando los tiempos para que la especie se recupere, con reproducciones viables, donde el hombre no sume una amenaza más a las propias del ecosistema. Estas repoblaciones deben realizarse de la mano con las autoridades provinciales y nacionales, quienes deben asumir los costos que esto conlleva.
Hemos encontrado en diferentes lugares evidencias de pesca irracional que, con fines meramente comerciales, realiza una extracción desmedida de ejemplares, destruyendo la especie. Te anexamos una fotografía tomada en la laguna de Adela, provincia de Buenos Aires.

Teniendo en cuenta los conocimientos de la especie que han logrado en este tiempo, si tuvieran la oportunidad de colaborar en la redacción de algún tipo de reglamentación de protección, ¿cuáles serían los puntos sobre los cuales apuntar con certeza? ¿El tamaño de los peces? ¿La época del año como para establecer algún tipo de veda? ¿El preservar zonas con vegetación? ¿Algún otro factor?
Basados en el trabajo que venimos desarrollando, hemos adelantado algunos aspectos de este tipo; sin embargo, para tener datos más precisos debemos desarrollar un trabajo de investigación que implica la determinación de aspectos como:
- Talla de madurez sexual
- Talla mínima de captura
- Dinámica de poblaciones en cuerpos de agua naturales.
Enfocados en una reglamentación futura, Hopliass requiere recursos destinados para esto y con los que a la fecha no contamos. Es además una prioridad contribuir a que se desarrolle dicha reglamentación, dado que sería la única herramienta para garantizar que nuestro esfuerzo, junto con el de todos los pescadores deportivos y personas comprometidas con esta especie, pueda dar verdaderos frutos.
Es claro que como viene siendo tratada la especie se necesita un proceso largo para que puedan recuperarse las poblaciones naturales; la tararira que se encuentra en la cima de la cadena debe estabilizar su dinámica poblacional. De ahí que sea urgente revisar la reglamentación relacionada con su extracción.
Podría llegar a ser viable, incentivando su cultivo; para esto es necesario investigar más acerca de esta especie y desarrollar el engorde, en forma responsable, con fines comerciales. 

¿En qué se puede colaborar para que el proyecto se sostenga en el tiempo y sea viable?
En principio son muchas las posibilidades que se tienen para recuperar esta especie y el equipo Hopliass está conformado por tres personas con vocación, conocimientos y disposición para realizar un proyecto de esta magnitud. Sin embargo, nuestros recursos son limitados y, si bien a la fecha no hemos recurrido a solicitar alguna colaboración económica, estamos abiertos a la buena predisposición de personas o entidades que en la medida de sus posibilidades quieran aunar esfuerzos, vigilando, protegiendo, denunciando prácticas irregulares y  realizando cualquier aporte que consideren pertinente.

Para ir cerrando, les quiero agradecer este laburo que han hecho en nombre de todos los pescadores que aman a las tarariras, ¿quisieran darles algún mensaje?
Es apasionante poder desarrollar un trabajo que te dé tanta satisfacción y que te plantee un reto diario, no sólo por el logro a nivel económico, sino por el placer que  vos y todos los aficionados de este hermoso deporte pueden desarrollar con total plenitud.

El equipo




Gracias a todos, en especial a vos Guille, que como muchos nos brindás un apoyo enorme con la difusión de proyectos como el nuestro.
Un fuerte abrazo, Equipo Hopliass

Para finalizar este informe, me permito volcar algunas reflexiones que me surgen. Este gran logro, como muchas de esas cosas que suman, es una iniciativa que surge de la impronta, la pasión y la buena voluntad de un grupo de personas con inquietudes y ganas de hacer algo. Sin el respaldo de entidades estatales ni privadas, sólo con la voluntad de hacer, lo han logrado. Éste es el primer paso, muy importante, de una larga serie de pasos que hay que dar para asegurar el futuro de la pesca de tarariras y con la que todos los pescadores deportivos debemos comprometernos para que no se detenga, hay que buscar las maneras de apoyar y sumar, hay que involucrarse y comprometerse, ya que sin ello todo este esfuerzo se perderá y será en vano. El gran desafío es garantizar la continuidad de este proyecto, y aprender mucho más sobre la biología de las hoplias. Hay que preservar y recuperar los ecosistemas donde viven, hay que trabajar en nuevas reglamentaciones, hay que perfeccionar y aunar las antiguas, hay que controlar el cumplimiento de las mismas, hay que realizar una larga tarea de concientización de la fragilidad del recurso, hay que lograr la prohibición de la exportación de tarariras, hay que ver la viabilidad de que mediante la cría artificial se pueda evitar la pesca comercial de esta especie, y podría seguir enumerando cosas que faltan, pero hoy es el momento de festejar este logro, esta luz en el final del camino, esta esperanza para que todos podamos disfrutar el blogblogblog del jitterbug y la explosión del agua cuando una tarucha lo detona.

Hagamos lo posible por difundir esta información, mientras más tomemos conciencia, mayores son las probabilidades de lograr objetivos superadores. Es responsabilidad de todos.
El Equipo Hopliass lo integran Mariluz Grau, Oscar Blanco y Alejandro Contreras.
Mail de contacto: hopliass@gmail.com
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Fotografias: Equipo Hopliass